Reparación valvular mitral

¿Cómo se trata? Acceso quirúrgico y Reparación de la insuficiencia mitral

El acceso quirúrgico habitual suele ser una esternotomía media, pero también se puede llevar a cabo mediante cirugía mínimamente invasiva utilizando pequeños accesos laterales del tórax. Esta última no siempre es posible y la elección del tipo de acceso dependerá de cada situación en particular.
El 80 % aproximadamente de los casos, el velo afectado o responsable de la insuficiencia es el “posterior” y su reparación se suele hacer mediante pequeñas resecciones de tejido. También es posible repararlo implantando nuevas cuerdas valvulares confeccionadas por la industria con un material de derivado plástico, pero dicha técnica se suele reservar para la afectación del velo anterior, mucho menos frecuente y más complejo de reparar. Finalmente, se pueden dar situaciones en las que se presenten los dos velos holgados y que ninguno de los dos sea capaz de
mantener la presión sanguínea, esta afectación sería la más compleja de reparar y requiere del uso al mismo tiempo de diferentes técnicas de reparación y de cirujanos con experiencia en reparación mitral.
Más del 90 % de insuficiencias mitrales causadas por un prolapso exclusivo del velo posterior se pueden reparar con éxito por nuestro equipo de cirujanos. En el caso del velo anterior dicho porcentaje, aunque sigue siendo elevado, se reduce y dependerá de la complejidad de cada caso.

Válvula Mitral reparada
Válvula Mitral reparada

¿Qué ventajas tiene respecto a la sustitución valvular por una prótesis y qué durabilidad tiene la reparación?

Si no es posible la reparación mitral, se tiene que sustituir la válvula del paciente por una prótesis valvular. No obstante, siempre será preferible la reparación del prolapso mitral porque presenta ciertas ventajas respecto a la prótesis: menos complicaciones durante el procedimiento, se evitan riesgos relacionados con la propia prótesis valvular con el paso del tiempo y se elude la necesidad de tomar, en muchos casos, fármacos anticoagulantes de por vida. En manos de nuestro equipo, el procedimiento se realiza con un riesgo de complicaciones bajo y con un porcentaje de mortalidad por debajo del 1%. La durabilidad de una reparación mitral exitosa es alta con el paso del tiempo, incluso aceptando algún grado de regurgitación residual leve, alrededor del 90 % a los 10 años de la intervención.